El dar un galardón a una persona por su dedicación a los demás es lo mas gratificante que un ser humano puede sentir.
Al referirnos a la entrada anterior en la que reproducimos la noticia de damos cuenta del reconocimiento a una de las mejores personas que hemos tenido la suerte de compartir con ella nuestra existencia con él.
Ya son muchos años de dedicación a las personas en riesgo de exclusión, o pertenecientes ya a esa tesitura. Es un hombre de carácter excepcional.
Ha dedicado su vida a un trabajo constante, sin altibajos, un combatiente de la desigualdad, de la desinformación, de la desidia social ante los problemas—solo nos importa, cuando nos toca—, y la inhibición política ante situaciones que bien podrían disponer de otros medios de prevención. Pero ni se contemplan.
La Fundación Barbón viene concediendo sus premios anuales desde 2004. El primer galardonado fue el pueblo de Madrid por su respuesta a los atentados del 11 de marzo. Le siguieron los ponentes de la Constitución de 1978, la Asociación Maeve y Kike Figaredo y el Banco de Alimentos de Asturias, entre otros.
Un apapacho , Pepín, Gracias por todo.
MomentosPress 